Siempre se dice que ya no nieva ni hace frío ni llueve como antes, pero el año 2009 acabó con mucho frío, agua e incluso nieve, y 2010 ha empezado parecido.
El día 17 de diciembre cayó una importante nevada, seguida de unos días con temperaturas por debajo de los 10 grados bajo cero.
Luego el tiempo suavizó, pero llegaron unos cuantos días de lluvias. El 7 de enero volvieron las nieves, rápidamente seguidas lluvias y temperaturas que han permitido que la nieve se fundiera y que, junto con la lluvia, hayan desbordado los ríos en toda la comarca, como el Odra, el Arlanzón, el Ubierna y el Brullés.